sábado, 25 de octubre de 2008

Albedo


El albedo es la relación, expresada en porcentaje, de la radiación que cualquier superficie refleja sobre la radiación que incide sobre la misma. Las superficies claras tienen valores de albedo superior a las oscuras, y las brillantes más que las mates. El albedo medio de la Tierra es del 30-32% de la radiación que proviene del Sol.

En astronomía ofrece un medio indirecto de averiguar la naturaleza de un astro mediante la comparación de su albedo con el de materias conocidas: el más alto corresponde al del planeta Venus, el más bajo a algunos asteroides carbonáceos y así como a los satélites marcianos Fobos y Deimos.

La Luna no tiene luz propia, sino que refleja la que recibe del Sol. Dependiendo de la mayor o menor iluminación, así será la fase lunar.

Como el albedo lunar es 0.072, esto significa que refleja el 7.2% de la luz que recibe del Sol, quedando el 92,8 de la radiación solar absorbida, incrementándose al pasar del rojo al violeta, y resultando por tanto que la Luna es más amarillenta que el Sol, aunque pensemos que realmente la claridad lunar es azulada (efecto Purkinje).

Con ayuda de fotómetros especiales se ha determinado que el Sol, en verano y a mediodía, brilla por término medio, unas 398.107,1716 veces más que la Luna llena, teniendo el Sol una magnitud de -26.8, siendo el de la Luna en su fase de plenilunio de -12.55 por término medio.

En esta imagen de la Luna llena de muy alto albedo, obtenida por D. Alejandro Mendiolagoitia, desde el observatorio, muestra el elevado contraste de las diversas zonas